Los mismos tienen como principal denominador común sus grandes alturas ya que se encuentran en la zona central de los Andes donde este cordón se ensancha dándole lugar a una región elevada que se denomina Altiplano-Puna, que si bien técnicamente tiene regiones diferenciadas como la Puna de Atacama, la altiplanicie Boliviana y la Puna Argentina, a grandes rasgos y para el caso de los Pasos de Cordillera no creemos necesario diferenciar.

Como características principales podemos decir que en esta zona se encuentran algunos de los Pasos fronterizos de mayor dificultad ya que uno de los principales temas a tener en cuenta a la hora de pedalear por estas geografías es la adaptación del cuerpo a las grandes alturas ( Hace tiempo escribimos una nota con algunas recomendación respecto a este tema LINK) en cada uno de estos pasos hay al menos un punto alto que deberemos sortear, es muy común que en un mismo Paso tengamos que subir algunas Cuestas o Abras que se encuentren por arriba de los 4500 msnm. Es importante no asustarse con los números ya que a simple vista pueden parecer intimidantes pero hay que tener en cuenta que la media en esta región ronda en los 3000/4000 msnm, por lo tanto una vez que logramos la aclimatación necesaria estos puntos altos dejan de parecer inalcanzables.  Otra factor que hay que tener en cuenta al aventurarse por estas regiones es que a excepción del Paso Jama no es mucho el transito vehicular que transita por esos caminos y tampoco son muchos los parajes o pueblos que existen cuando nos internamos en la alta cordillera, por lo tanto tenemos que saber que vamos a estar un tanto aislados durante largos periodos e inclusive en Pasos como Socompa pueden pasar varios días sin que exista la posibilidad de contacto con otras personas. Eso entre otras cosas nos plantea la necesidad de estudiar bien la zona antes de aventurarnos ya que otra característica de estas regiones es que al ser un desierto de altura no cuentan con muchas opciones donde encontrar agua potable y todo aquel que tenga cierta experiencia viajando en bici sabe que el agua nunca nos puede faltar y menos aun cuando estamos expuestos a grandes altitudes donde es sumamente importante mantener una excelente hidratación.

Resulta muy difícil describir los paisajes de la cordillera de los Andes, pero lo primero que podemos decir es que si al observarlo desde afuera el cordón es impactante, desde adentro es simplemente indescriptible. En la zona norte el paisaje es específicamente árido, los fuertes vientos, la crudeza del clima y las bajas precipitaciones hacen que la flora sea muy escasa, con lo cual lo que abunda en estos paisajes es el elemento mineral. Grandes picos volcánicos, interminables salares y algunas cuantas lagunas de altura, por lo general de aguas salinas o alcalinas. El diverso relieve que presentan los Pasos de esta zona también nos hace encontrarnos con algunas estrechas quebradas y pequeños valles denominados vegas en donde es muy común ver reagrupamiento de fauna autóctona.

El clima en esta zona es un tanto hostil para los viajeros ya que en la zona en cuestión existe una grandísima amplitud térmica que hace que durante el dia las temperaturas lleguen a  los 30 grados centígrados y por las noches desciendan por debajo de los 0ºC y mas aun si nos encontramos en zonas de mayor altitud donde las temperaturas descienden aun mas. Las lluvias son estivales y muy escasas, pero hay que tener muy en cuenta que en los meses de verano (Finales de Diciembre a finales de Febrero) se producen fuertes tormentas eléctricas que resultan ser muy peligrosas teniendo en cuenta que no existen en la zona muchos lugares donde refugiarse. El viento también puede jugar un papel protagónico a la hora de realizar un cruce cordillerano en esta zona ya que suelen soplar vientos sumamente fuertes, generalmente desde el Oeste, que pueden hacer que el avance sea muy trabajoso y hasta desesperante. Nuestra experiencia en esta zona nos dice que mucho de que la realización de un Paso en estas geografías tenga mas de disfrute que de padecimiento depende en gran porcentaje de la aclimatación a la altura que se haya logrado, pero también al clima que nos toque al momento de hacer el cruce, se asombrarían de lo que puede cambiar nuestra percepción de una ruta, un paisaje o un lugar si lo dejamos en manos del clima en esta zona Cordillerana.

La vegetación que predomina es la estepa arbustiva que a menudo se presenta en forma de matas dispersas. Las plantas suelen ser bajas a excepción de algunos ejemplares de cardones y cactus que podemos encontrar en la zona de Pre-Puna.

Dentro de la Fauna se destacan los camélidos como la Vicuña, la llama, el guanaco o la alpaca y también otros animales como el zorro, el puma y aves características de la zona como el suri, el cóndor, los flamencos rosados que visitan estacionalmente las lagunas de altura, entre otras ejemplares de menos tamaño.

Como dijimos con anterioridad, esta es una zona que por sus grandes alturas, su clima extremo y la poca densidad poblacional, se transforma en un verdadero desafío para recórrela en bici. Particularmente recomendamos que todo aquel que se aventure en esta región de la cordillera, tenga alguna experiencia previa en altura o al menos respete los tiempos de aclimatación que cada cuerpo requiere. También es importante contar con un equipamiento adecuado para la alta montaña que puede no ser necesario con buen clima pero, se transformara en un elemento diferencial en el caso de malas condiciones climatológicas. Nuestro punto de vista respecto a la cordillera es de absoluto respeto y por ello la tomamos como una escuela de donde aprender. No hay que temerle a las montañas pero si estar pendientes de lo que nos van enseñando en cada momento.  Sin apuros, respetando, cuidando el entorno y sin subestimar cualquier persona puede llegar a lugares impensados.